Inés es la flamante hija de mi amiga Amaya. Por ella abrí cajas y revolví baúles: Un ovillo por aquí, un retalico por allá, ganchillo, botones y voilá! Esto es lo que dio de si la semana pasada y hoy ha partido para Zaragoza.
Eso eran las 15 niñas de 5 años de media en el festival fin de curso de la escuela de danza de Esther Racero para las que hice estos trajecillos el mes pasado.